A pesar de que el perfil concreto dependerá de cada empresa, ya que todas tendrán requerimientos específicos, en general los headhunters tratarán de buscar un tipo de persona muy alejada de ciertas características poco deseables. A pesar de que roce el cliché, existen ciertas características físicas o de actitud que pueden resultar determinantes tanto para resultar elegido como para ser descartado; la mejor garantía de éxito, en cualquier caso, será mostrar lo mejor de ti durante el tiempo que dure la entrevista.
De esta manera, la búsqueda de talento en un directivo pasará por englobar muchos aspectos que, a priori, podrían no parecer tan decisivos, y sin embargo a menudo lo son. Factores como la ropa escogida para el encuentro, la actitud corporal demostrada o la manera de expresarse jugarán un papel primordial. Uno de los puntos más importantes en los que se centrará el headhunter es que exista química entre el candidato y la empresa contratante. La caza del talento puede pasar por encontrar a alguien que muestre entusiasmo y determinación al hablar en vez de una actitud más pasiva. Una actitud corporal que dé visos de seguridad, de ser persona de “acción” y poco dubitativa también resultaría valorables, puesto que un cargo de responsabilidad significa en la mayor parte de los casos, interactividad, que no puede estar exenta de cierto carisma.
Otro de los aspectos que puede valorar un headhunter es el hecho que el candidato sea capaz de adecuarse a distintos ambientes; la adaptabilidad gana puntos en puestos de alta responsabilidad, donde la resolución y el no flaquear ante cualquier problema también están muy bien considerados. Así, entender que un puesto ejecutivo es un lugar de poder significa huir de actitudes que puedan mostrar debilidad.
Esto nos lleva a otro tipo de preferencias, quizás algo más ingratas con los candidatos pues poco o nada podrán hacer en muchos casos por modificarlas: aspectos como una figura descuidada puede influir negativamente en el proceso.La referencia al físico trata del control de uno mismo sobre su cuerpo, algo que sería extrapolable al control sobre su puesto de trabajo. También sería sinónimo de éxito, de superación personal y de constancia, puesto que triunfar sobre uno mismo hace más fácil la posibilidad de triunfo en el terreno laboral. Cabe decir que estas tendencias (obviamente no son directrices fijas o seguidas a rajatabla) se aplican tanto en hombres como en mujeres.
A pesar de este compendio de cualidades, lo más importante para un negocio que necesita cubrir un puesto de responsabilidad es dar con la empresa adecuada de headhunting que se preocupe por dar con la persona indicada, aquella que se adecue mejor a lo que se está buscando. Empresas como Headhunters Barcelona tienen muy clara la necesidad de saber exactamente qué es lo que se está tratando de conseguir en cada caso para acertar con el proceso de selección, evaluando en profundidad aquellas aptitudes reales que harán del candidato la persona ideal para el puesto.